"12 de Mayo 2005
Disfraz de piedra indiferente
Vamos, hombre, que no me creo que mi disfraz siga colando. Tírame todas las piedras que quieras, que yo estoy hecha de piedras más duras. Llámame de todo, grítame, dime que no sabes si me odias, di todo lo que se te pase por la cabeza. Total, a mí me da todo igual, no? Haz como que no existo, igual se vuelve verdad. Dime que no sabes dónde va esto, que no sabes si existe un esto. A mí no va a importarme, porque a mí me da todo igual. Luego intenta arreglarlo y hazme sentir todo lo culpable que puedas. A ver si conseguís que me importe algo. A ver si conseguís que reaccione. Vamos, échame en cara cada segundo que no he hablado, dime que ya no estás agusto conmigo. Yo me esconderé detrás de mi manto de indiferencia, y creerás en él. Me pondré la máscara con la que saludo a mis vecinos en el portal y seguirás pensando que tengo cara de gilipollas. Pon un poco más de cemento en mis zapatillas, si total, cuando me caiga al agua no voy a necesitar nadar porque tengo una bombona inagotable de oxígeno. Lo que no sabes es que parte del aire eres tú. Golpéame hasta que no sientas los brazos, yo soy de acero y no me voy ni a enterar. Y aunque me entere, a mí todo me da igual. No te das cuenta que si he tenido que hacerme un muro de piedra, que si he tenido que parecer indiferente ante todo, si casi nunca soy capaz de reaccionar, si aveces pretendo parecer de acero es precisamente porque todo me afecta demasiado?"
Dime que no te has convertido en ellas. Que no tienes ni sus agujas de coser, para ir pinchando, a ver si sangro, ni el mazo de juez, para dictaminar desde su pedestal el bien y el mal absolutos con su consabidísimo "pues me parece fatal que..."
Podría ir repartiendo en este post una cuenta ascendente, hasta 3, por ejemplo, pero me parece una gilipollez contar el número. Para mí cuenta el daño. Y mucho más la intención (por si no ha quedado claro repitiendo palabra por palabra algo que dije hace tanto tiempo). Y podría también explicarte lo innecesario de todo eso, que sangro, reacciono y exploto muchísimo antes de que el experimento sea planteado. Intención, recuérdalo. Podría decirte todo el daño que me hace... todo, pero en principio me conoces y debería ofenderte el hecho de que te lo intentara explicar y decir.
Simplemente, no entiendo todo este daño gratuito.
[Cuatro]
No tiene nada, nada, nada, que ver con todo eso. No tiene que ver con agujas. Ni con ver si sangras. Sé que sangras. Sí, ofende la duda. Nos conocemos muy bien. Y lo sabemos.
No tiene nada, nada, nada, que ver con todo eso. Ni tiene que ver con el número, para mí ni siquiera con la intensidad. No tiene nada que ver con todo eso. No tiene nada que ver con la sexta. Ni con la quinta. Ni con ninguna.
No olvides los signos de interrogación. Son lo más importante de la entrada. No es un ultimatum. No es un chantaje. No es una amenaza. Es un grito de socorro. Es una lamentación. Es una lágrima. Una bala de revólver directa a mi cabeza.
No es una aguja. O quizá sí. No contra ti. La vida es eso. Las cosas pasan. Las agujas están ahí, aunque no las empuñe nadie. Y nos pinchan a todos.
Me conoces. No me he convertido en ellas. Deberías saberlo. Ofende la duda.
Puedo entender que no lo entiendas. Pero no tiene nada que ver con lo que has escrito.
Eso lo dijo Anonymous cuando daban las 16:56 del Viernes 15 de Agosto 2008Al parecer, no soy la única que se autocensura. Muá.
Eso lo dijo Lore cuando daban las 16:56 del Viernes 15 de Agosto 2008