Estoy nerviosa, irascible, susceptible, blandita, ñoña, empanada, somnolienta... pero nerviosa más que nada. Y no son los nervios de antes de un examen o de una reunión fea, es un tipo distinto. No sé cómo explicarlo. Estoy de punta. Este fin de semana me quedo sola y el lunes empiezo el master. El master... Me da miedo. Es algo tan infinitamente cojonudo (ycaro) que no me lo había llegado a plantear en serio. Y que seguro que jodo estrepitosamente de alguna manera. De la peor de las maneras, muy probablemente.
Ñiñiñiñiñiñi... estoy nerviosa...